Análisis de la película "Con ánimo de amar" (Won Kar-wai, 2000)

Por Giuly Kiersz

La película está estructurada de tal manera que pareciera que fuese el Sr. Chow quien la crease a modo de una de sus entregas. Observando la puesta en serie del principio notamos como las escenas se van sucediendo como pequeñas anécdotas que en sí mismas no conforman un sentido, pero uniéndolas se va hilando la historia.

      Podemos ver también, como cuando están ambos escondidos en la habitación y llega el amigo de Chow borracho, éste lo incorpora a la historia que está escribiendo lo que nos hace sospechar sobre la historia misma. Es decir la historia que existió, pero nosotros, espectadores, la vemos a través de sus ojos contada años después. Como dice el epílogo: “Él recuerda esa época pasada, como si mirase a través de un cristal cubierto de polvo, el pasado es algo que puede ver pero no tocar. Y todo cuánto ve está borroso y confuso” de esto se desprende la poética de la película, con sus elementos:

            La lluvia: siempre presente, avasalladora, recordando a los protagonistas la circunstancia en la que viven. Una situación de la cual se resguardan bajo techo juntos. Donde sus vestimentas se funden en el decorado, imperceptibles, como atados a un orden del cual no pueden escapar.

            El humo del cigarrillo: encuadrado varias veces por la cámara como ese pasado que se ve pero no se toca. Aquello que se siente porque está en el aire pero nunca se llega a agarrar. Se podría comparar también con la cotidianeidad de los personajes y las infidelidades de sus respectivos cónyuges, lo saben pero no lo dicen, lo saben pero no lo pueden tocar, alcanzar.

             A lo largo de la película cada vez más los personajes, las escenas aparecen veladas por cortinas, fragmentadas en espejos. Esto remarca la idea que él ve el pasado confuso y borroso, mezclando aquello que recuerda con aquello que inventa. Como si los espectadores fuésemos el árbol y él nos estuviese contando su secreto.